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Caída de precios en arrendamientos de campos

Los arrendatarios pagarán 12% menos, en promedio, midiendo en kilos de soja. Y la baja de precio de la oleaginosa deprime aún más el alquiler, en un contexto inflacionario.

La pérdida de entusiasmo de los productores por los magros márgenes del negocio agrícola para la campaña 2015/16 devaluaron los precios de los arrendamientos y cambiaron el esquema de negociación, inclusive los mejores campos del país.

Así lo reveló una encuesta de la asociación de productores CREA, que aseguró que los precios de los alquileres de los campos bajaron, en promedio, 12% desde la campaña pasada.  Adicionalmente, como los alquileres se pactan en kilos de soja por hectárea, por la baja del precio de la oleaginosa los dueños de los campos perdieron, en pesos, el 30% del valor del arrendamiento respecto de la campaña pasada.

Eso, en un contexto en el que los impuestos, que paga el dueño del campo, siguen subiendo.. La situación, inclusive empeora al aplicarle la suba general de los precios del último año, cercana al 25 por ciento.

Más allá de las pérdidas promedio, en el oeste de la provincia de Buenos Aires y el este de La Pampa, la baja del precio pactado en soja llega a un recorte del 20% respecto del año pasado. Al norte de Buenos Aires y en Entre Ríos la baja es del 17%. Al sur de Santa Fe y sur de Córdoba, la merma en soja es del 14%. Adicionalmente, en los campos del norte del país, que ya sufrieron una baja más fuerte el año pasado, la merma alcanza el 11%. Se trata de campos en los que la rentabilidad está comprometida desde hace tiempo y coincide con las provincias en donde las protestas de los productores más se hicieron sentir en las últimas semanas, como Salta y Chaco.

En algunos campos marginales del norte también se da una situación excepcional pero llamativa. A falta de arrendatarios, sus dueños ceden la tierra a cambio de que les paguen los impuestos y le mantengan limpio el campo, porque de quedar ocioso, las malezas y el abandono por una temporada generarían costos enormes para la siguiente. La gravedad de la situación se refleja en que por primera vez en mucho tiempo caerá el área agrícola del país. Según la encuesta de CREA, más del 70% de los productores que arriendan tierras piensa mantener o reducir el área arrendada y solamente 25% piensa a aumentarla.

Con esta baja de precios en los campos, y suponiendo un buen rendimiento en los cultivos, el negocio de Granos seguirá siendo rentable, mientras se realicen todos los pasos con dedicación y excelencia. Esperemos que así sea.

Fuente: Nuestroagro