No hay dudas que el nuevo contexto económico, la apertura que pregona el nuevo gobierno, la mayor previsibilidad y reglas de juego claras, hacen que las empresas estén mucho más animadas a invertir que en el pasado. Hoy se ha generado shock de confianza en la Agroindustria que sin dudas está funcionando como un motor que dinamiza a varios otros sectores.
La Argentina tiene el clúster productivo oleaginoso más competitivo del mundo, más competitivo que Brasil e incluso que EE.UU. El desafío es lograr maximizar el potencial que tenemos como sector.
En este sentido, el Director General de ADBlick Agro SA., José Demicheil, explicó que “como empresarios del agro, debemos reposicionar al sector. Para ello, tenemos que hacer muchas cosas bien, de manera sostenida, para poder así ir mejorando y apuntar a ser el supermercado del mundo. Más allá de todos los problemas que tiene Argentina y que va a costar un rato largo resolverlos, este es el principal desafío para generar empleo e inversión y lograr capitalizar esas oportunidades comparativas que tenemos como país”.
La empresa que conduce Demicheli, desarrolla Proyectos de Inversión ligados al Agro, donde invita a inversores a participar con un ticket minoritario, de negocios de escala y poder así favorecerse de todos los beneficios que eso genera tales como diversificar riesgos, mayor eficiencia en costos, lograr sinergias con grandes compañías, grandes volúmenes de producción, etc.
Precisamente, el Proyecto de siembras y agricultura a escala, “ADBlick Granos”, recientemente cerró el resultado de su última campaña. Con 32mil hectáreas cosechadas y a pesar de una campaña magra de girasol como principal cultivo, la renta fue nuevamente positiva y el inversor logró hacerse de utilidades por el 6% en dólares. Hoy el fideicomiso ya está trabajando en su 9na campaña, donde apunta a 45mil hectáreas de cultivo y en la cual ya se han sembrado las 12 mil hectáreas de “fina”. Según Demicheli, resulta clave alquilar buenos campos, ir ajustándolos año a año, ser buen productor, diversificar cultivos y variedades para lograr mejorar la productividad.
“Desde las empresas de producción a escala, proyectamos a mediano y largo plazo, teniendo en cuenta que la población mundial seguirá en aumento, que hay un consumo sostenido de proteínas y que los términos de intercambio llegaron para quedarse. En ADBlick Granos hemos incorporado Management, y continuamos creciendo en busca de un plan quinquenal de 100.000 hectáreas”, comentó Demicheli, quien además agregó que “el negocio de producción en campos arrendados ha ajustado su margen teniendo el agricultor que acceder a escala para ser muy eficiente en costos, transformarse en un verdadero empresario y manager para cuidar cada variable”.
Con un contexto político favorable, con condiciones agroecológicas privilegiadas y con demanda futura asegurada, el Agro argentino es el principal sector para dinamizar la economía. Tenemos una excelente perspectiva por delante para lograr capitalizar esas ventajas comparativas que gozamos como país. Ojalá podamos hacerlo para lograr la competitividad que exige el mercado hoy.