Hablemos de Ganadería en números

Según los últimos datos oficiales, en los primeros meses del año la faena vacuna creció respecto al mismo periodo del año pasado. A pesar de haber disminuido la faena en febrero, por ser un mes corto y con muchos feriados. Se estima que hasta la primavera va a continuar estando la faena por encima de los índices del año pasado. Esto se puede deber a que muchos campos están heridos en su producción forrajera debido a venir de un verano con una fuerte sequía, la cual fue precedida por inundaciones. Esto ocasiona que muchas categorías de animales que tal vez no estén del todo listas tengan que salir al mercado, por la incapacidad de continuar con su alimentación y hacer lugar en los establecimientos para la siembra de pasturas invernales. De cara a un invierno que se avecina, época con menor producción forrajera de la mayoría de los sistemas productivos, sin proyecciones de una notable mejoría en el régimen de lluvias.

A esto hay que agregarle el aumento en los costos de la alimentación y producción, lo cual no fue acompañado por aumento del precio de la carne, haciendo que resulte inviable en muchos casos la recría con suplementación, que sin lugar a dudas va a llevar a un aumento de la faena, en gran parte por deshacerse los establecimientos de las categorías más improductivas y de difícil manteniendo como lo son las vacas vacías y las vacas viejas (exportables a China, como carne congelada), como también de animales terminados gordos pero sin llegar a su máximo potencial de peso por el costo elevado del alimento. Esto conllevará a una falta de Novillo pesado para exportación con destino UE, por lo que debiera tender a subir el precio del mismo.

A su vez, los años 2015 y 2016 fueron años de aumento del stock vacuno nacional, lo cual disminuye el porcentaje de animales que van a faena. Este año en transcurso se estima, con los datos que dejo la última vacunación de aftosa, que hubo una estabilización del stock, por lo que se debería tener faenas más altas que estos últimos dos años permitiendo crecer en exportaciones. Según números preliminares se estima crecer un 15-20% respecto del año pasado (no olvidemos que el ’17 creció un 35% respecto al ’16 gracias al impulso que le dio el gobierno a la ganadería). De ser así, permitirá subir otro puesto en el ranking de exportadores de carne acercándonos de a poco a ese viejo podio que supimos tener entre los 3 mayores exportadores de carne vacuna.