Los desafíos del sector agroindustrial para recuperar la competitividad

Próximos a encarar un nuevo ciclo de Agricultura en Argentina, sostenemos que se viene una campaña muy positiva ya que hay expectativas atractivas de que la demanda supere a la oferta total. Seguramente vamos a asistir a un ajuste de stocks que generará precios en alza. Esto lo vemos así dado que el crecimiento poblacional del mundo sigue a un ritmo relativamente importante, y el PBI crece prácticamente en todos los países y más en los países en desarrollo. Estos son los factores que traccionan la demanda global de granos.

Sumado a esto, en lo que el mercado interno respecta, tuvimos una última campaña con mucha sequía, lo que afectó el crecimiento de cultivos gruesos (el maíz y la soja fueron los más golpeados), exceptuando el girasol que a pesar de las altas temperaturas y la falta de agua supo aguantar el clima y poder tener un muy buen rendimiento en este último periodo.

Lo contrario pasó con los cultivos denominados finos, ya que la tardía llegada del agua para los gruesos le vino muy bien a estos últimos y pudieron solventar en gran medida las pérdidas que veníamos percibiendo. Además, la expectativa de un buen precio, nuevos aportes de humedad a los suelos y la necesidad de contar con los aportes económicos de la campaña, ubican todas las miradas en el cultivo de trigo. Una investigación de último momento muestra el beneficio en los costos del trigo; en el que se proyectó un margen teórico de 4.009 pesos y 26 quintales por hectárea en campo propio, lo que significa un 124% más que lo que se estimaba para la misma campaña del año pasado. Este crecimiento interanual está por encima de la inflación del 29% aproximadamente 4 veces.

Los saltos que buscamos

Las abundantes sequías en el país para lo que fue la última campaña de siembra y cosecha de cultivos generó una baja en los costos de alquiler de los campos y precios de los mismos, por lo que el sector se vio muy golpeado, pero, en contrapartida a esto vemos con seguridad que es un buen momento para entrar al negocio ya que podemos aprovechar la baja de precios para incrementar las hectáreas en la campaña que sigue y así usar como apoyo para dar un gran salto esta brecha entre los bajos costos de producción y los futuros precios de los cereales a comercializar en la campaña 2018/2019.

El gobierno

Como ya vimos en estos últimos años, el sector agropecuario recibe un gran apoyo por parte del gobierno, en reducción de intereses e impuestos y siempre una gran predisposición para ayudar al agro a enfrentar los problemas con los que se topa. Esto lo tomamos como un segundo apoyo para este gran salto que buscamos y esperamos ya que así reducimos la volatilidad de lo que son lo grandes riesgos que tenemos en nuestros país por producción a cielo abierto, siendo que podemos subir el piso a nuestros proyectos pero sin la necesidad de bajarles el techo.