De todos los cereales de invierno que se producen en la Argentina, la cebada es uno de los principales protagonistas. De acuerdo a datos aportados por el Ministerio de Agroindustria de la Pcia. de Buenos Aires (principal productora, puntualmente en la Zona del Sudeste), se ha sumado Corea del Sur como nuevo destino en el mercado de exportación. La cebada es destinada básicamente a la producción de cerveza; en caso de existir algunos inconvenientes de calidad, la misma en su defecto es comercializada para alimentación animal como “cebada forrajera”. Esta noticia da indicios de que la Argentina comienza a reinsertarse en el mercado mundial, lo cual representa una gran oportunidad… Recordemos que somos los únicos capaces de satisfacer la demanda creciente de alimentos que existe a nivel global.
La Pcia. de Buenos Aires produce el 95% de la cebada nacional, concentrando la producción en varios municipios de la región conocida como “Sudeste Bonaerense” como Necochea, Lobería y Tandil, entre otros. La negociación lograda con el país del Lejano Oriente no solamente es importante para garantizar otro puente de demanda, sino que también a nivel local permitirá aumentar la superficie sembrada con este cultivo (factor clave a nivel rotaciones de cultivo y generación de empleo). Además de contar con condiciones agroclimáticas sumamente favorables para la producción de cebada, Argentina cuenta con tecnología de punta integrada por genética de primera línea, protocolos de cultivo y maquinaria de última generación.
A nivel Región Pampeana, es claro que venimos de una Campaña sumamente compleja para el sector. Hemos afrontado una primavera en demasía lluviosa, una de las peores sequías de los últimos tiempos y nuevamente, más lluvia en estos meses que complica la logística de cosecha y trae aparejados problemas de calidad. De cara a lo que viene, sin dudas la perspectiva es favorable. Los precios internacionales se encuentran en valores sumamente atractivos, estamos comenzando un año con expectativa climática neutra y varios de los costos a la baja. Sin dudas luego de un año tan difícil, estamos frente a una oportunidad en cuanto a los números que hace rato no veíamos.
A nivel mundial, todos sabemos que la población mundial está creciendo día a día, la esperanza de vida al nacer está en aumento en varios países emergentes e incluso, la configuración los paradigmas de alimentación está cambiando. En muchas charlas de café, siempre hacemos referencia al Lejano Oriente como principal referente de esta nueva era e impulsor del cambio. El nuevo acuerdo realizado con Corea del Sur, justamente viene a ratificar esta visión. El mundo demanda a raíz del crecimiento exponencial y Argentina presenta condiciones agro-ecológicas privilegiadas que lo hacen ser el cluster cerealero-oleaginoso más productivo a nivel mundial. Está en nosotros poder capitalizar esta oportunidad volviendo a ser líderes en la producción de alimentos, para estar así en la cresta de ola e impulsar nuestro camino hacia el crecimiento.