Este estudio sugiere que dedicar el 60% del tiempo a diseñar un equipo de alta performance y sus modelos de gobernancia, transmitiendo el propósito (“the reason why”), seleccionando las personas correctas, y dándoles el soporte organizacional adecuado, aumentará considerablemente las probabilidades de éxito. Sumado a esto, debemos acompañar con una buena estrategia de lanzamiento (kick off – launching) dedicando un 30% más del tiempo a definir las normas, la interacción entre los miembros y las habilidades que cada uno puede aportar para una ejecución efectiva. El 10% del tiempo restante es dedicado al soporte continuo y coaching “on-line” de los equipos que habremos conformado.
Esta perspectiva posiciona al líder formador del equipo más fuera de éste que dentro. En el fútbol, nos estaríamos refiriendo a la posición de los Managers (E.Francescolli CARP, G.Burdisso CABJ) y no a la de los DTs (M.Gallardo, G.Alfaro), por lo que vale preguntarse dónde radica el liderazgo y dónde la conducción.
En nuestro cotidiano como líderes, nos confundimos de roles (liderar o conducir) por lo que la regla del 60/30/10 resulta interesante para parar la pelota y ocupar el lugar de Managers/Líderes a la hora de conformar equipos, para luego conducirlo si es ese también nuestro deber.