Empezó la cosecha de soja y maíz en algunas regiones. La característica principal es la disparidad entre regiones, entre campos y entre lotes, debido principalmente a la relación entre la lluvia caída y la fecha de siembra. Los precios de los granos van a ayudar a que una campaña regular en promedio, se transforme en algo aceptable. Pero a nivel país las toneladas de soja no pasarían de las 43 millones y las de maíz quizás algo más. Muy poco para la necesidad de los productores y para la recaudación de impuestos y dólares que esperaba el gobierno.
Se observa un aumento progresivo de los precios de los agroquímicos en dólares. No es en todos, pero la tendencia es clara. Empezaron a aparecer las ofertas de pre campaña estimulando la compra con canjes de granos en disponible, en varios casos premiando con un precio de maíz o soja un 5% lo que mejora la relación insumo/producto. También las empresas ofrecen pagar con cheque diferido entre 180 y 360 días de plazo, pesificando la compra y con tasas del orden del 35% anual. No es el caso de los fertilizantes, un mercado que se mueve más con canjes disponibles o futuros o bien pago contado con descuento. Las tarjetas bancarias del agro están activas, también con tasas en el orden del 35%. La compra de insumos sigue siendo un destino interesante del exceso de pesos que algunas empresas generan luego de la cosecha.
La novedad ha sido que el sector agropecuario ha sido “discriminado” por la política ya que no podrá acceder a las mismas tasas que otros sectores. O sea que lo que parecía una posibilidad para las Pymes de financiarse al 30-35% anual (para aquellas que no tuvieran más del 5% de su stock de soja o trigo) ahora deberá ser a tasas de más del 50% según el Banco Central. No hubo demasiadas explicaciones, pero pareciera apuntar a que sea un estímulo para que los productores liquiden sus granos a una mayor velocidad. En este escenario pueden empezar a activarse líneas de crédito en dólares por parte de los bancos para productores de granos. No se observan alternativas razonables de financiamiento a más de un año.
Fuente: Apuntes para empresas Z+M
Alejandro Meneses
Teo Zorraquín